Machete

País: Estados Unidos

Reparto: Danny Trejo, Robert DeNiro, Steven Siegal, Lindsay Lohan, Jessica Alba, Michelle Rodriguez

Director: Robert Rodriguez

Por Lollah Kemper

Todos aquellos que apreciamos el cine de Rodriguez, veíamos Machete venir desde su primera aparición como trailer en la serie GRINDHOUSE, sin embargo, honestamente jamás pensé que el que parecia un “chiste local” de Rodriguez desde Spy Kids, fuera convertirse en el nuevo héroe de acción representante de los mexicanos ilegales en E.U.A.

Por supuesto que desde que vemos el poster, el reparto y el director, nos damos una idea de lo que vamos a ver, queremos sangre, sexo y clichés. Y eso es lo que obtenemos, junto con mucho humor negro y una crítica social que da miedo.

Después de todo, Rodriguez se las ingenió para hacer una cinta que no estuviera del todo vacía, sino que, le diera a los norteamericanos republicanos (conservadores) una lección sobre su doble moral. Los retrata como una nación vacía, convenenciera, y cruel, con políticos dispuestos a lo que sea con tal de conseguir más dinero.

En cambio, el pueblo mexicano se ve trabajador, fuerte, unido, religioso y simpático.

Es impresionante la forma en la que Rodríguez consigue utilizar todos los clichés de mexicano “pocho” y voltearlo en contra de los muy odiados “gringos” abusivos.

Me refiero a autos “tuneados” y a herramientas de jardinería, todos estos instrumentos usados estratégicamente no solo para darle una madriza a los malos, sino para además dárselas con “guante blanco”.

DeNiro demuestra un carisma y encanto odioso, de ese que nos enseñó en Meet The Parents; Trejo se consagra como el Rambo/Chuck Norris/McLane mexicano, rudo por naturaleza, pelea con taco en la mano y tiene a las mujeres que quiere. Michelle Rodríguez nos cautiva con su innegable belleza, carisma y ese exquisito parche en el ojo.

Lohan se muestra resignada ante su mala fama de niña rica/drogadicta/loca y parece que por fin encuentra un papel que le va como anillo al dedo.

Steven Seagal regresa más gordo que nunca, pero nos demuestra que no ha perdido su actitud, a pesar del español mal hablado.

El único problema que tiene la cinta en cuanto a actuación, es Jessica Alba, quien en un intento por hablar español, termina viéndose estúpida y ridícula. El hecho de que ni siquiera pueda pronunciar su mexicano apellido le quita crédito a la película y se torna muy molesto.

Para todos aquellos que vieron Planet Terror, estén atentos para pequeños detalles que les harán recordarla.

Una película divertida que vale la pena ver con mente abierta, sin clavarse mucho.

Finalmente recordar que es Robert Rodríguez, amante de clichés y cine viejo, yo Kemper, amante de violencia, sexo, México y rock n' roll, se las recomiendo.